60 AÑOS DE UNIVERSIDAD PÚBLICA: Universidad Nacional del Comahue

60 AÑOS DE UNIVERSIDAD PÚBLICA:

Universidad Nacional del Comahue por Beatriz Gentile*

Compartimos las palabras de la rectora de la UNCo en el 60º Aniversario de la Universidad.

Los privilegios, en sociedades divididas y excluyentes como lo fue la sociedad argentina a lo largo del siglo XIX y gran parte del XX, se ocultaron y solaparon con argumentos meritocráticos. Los pobres no llegaban a la universidad porque no pasaban las pruebas de acceso o, cuando las pasaban, no permanecían por ausencia de apoyo económico que evitara su rápida migración al mercado de trabajo.

En nuestro país, la Reforma Universitaria de 1918 primero y el decreto de gratuidad de la enseñanza superior en 1949 después, ampliaron el rango de inclusión de las mayorías sociales a la educación universitaria.

Pensemos, por ejemplo, que entre 1970 y 2013 mientras la población creció aproximadamente en un 77%, los y las estudiantes universitarias lo hicieron en un 750%.

Siempre la pelea por la inclusión de los desiguales perturba y desacomoda el orden de los que se consideran iguales. Y el derecho a la educación universitaria, no escapa a ello.

 

Hoy en nuestra Universidad el 54 % de nuestros estudiantes son primera generación de universitarios y para nosotros esto es un aliciente que nos confirma el camino originario, con el que fue creada esta universidad.

 Aquello que Felipe Sapag dijera en el acto inaugural de la Universidad del Neuquen en 1964 «De esta universidad depende que los hijos de los padres pobres tengan la oportunidad ambicionada; de esta universidad depende que los hijos de padres pudientes ya no emigren a otros lugares para proseguir sus estudios; de esta universidad depende que se multiplique nuestra riqueza”.

En su trayectoria esta Universidad fue dando respuesta a estas tres cuestiones:

*Nos encontramos entre las 10 primeras universidades argentinas por nuestras investigaciones y colaboraciones científicas.

*De aquellas primeras 5 Facultades originarias hoy contamos con 13 Facultades, 1 Complejo y 3 Centros Regionales Universitarios.

*De aquellos 296 estudiantes pasamos, en 60 años, a casi 34.000 estudiantes.

*De Cipolletti a Viedma y de Neuquén a Challaco, hoy estamos en todo el Alto Valle, en la linea Sur de Rio Negro, en el centro y sur de la Provincia de Neuquén y Rio Negro, y prontos a inaugurar nuestra sede en el Norte Neuquino en Chos Malal.

No cabe duda que esta expansión formó parte del crecimiento del sistema universitario y científico argentino como mencionábamos al comienzo.

La Universidad del Neuquén fue creada en una coyuntura particular, la década de 1960 en la Argentina fue una década compleja (no sabría decir cuál no lo ha sido en nuestra historia más reciente) pero lo cierto es que la fundación de esta universidad provincial conllevó parte de esa historia difícil y violenta.

Es sabido que cuando somos protagonistas de nuestro tiempo, tendemos a considerar que nuestro momento es o el más importante o el peor de la serie, según sea; sin embargo al revisar la historia de esta universidad , la distancia temporal relativiza nuestra percepción.

Cuando el entonces gobernador Felipe Sapag pensó en este proyecto, lo hizo más por voluntad política y convicciones que por una certeza de respaldo económico y material para llevarlo a cabo.  Para ello, contó con el asesoramiento de un hombre fundamental , Enrique Oliva, quien sería el primer rector de la Universidad Provincial.

Oliva, además de ser un intelectual reconocido, Doctor en Ciencias Políticas, miembro fundador del CONICET y periodista, fue una persona de enorme compromiso político. Perseguido por la Dictadura de 1955 y expulsado del país en 1957. A su regreso en los años 60’ fue  detenido y encarcelado durante tres años, detención en la que sufrió torturas y luego de ello es que encontró asilo en la provincia de Neuquén donde se sumó a la idea de proyectar la nueva universidad.

La impronta de Enrique Oliva  se evidencia en esta noción de una universidad pública y autónoma capaz de pensarse con criterio federal y vinculada al desarrollo productivo. Seguramente la idea de que a pocos kilómetros del campamento petrolífero de Challacó comenzará a funcionar la primera facultad de Ingeniería del sudoeste patagónico, anidó en más de una conversación con el entonces gobernador.

El golpe de 1976 lo obligó a exiliarse en Europa, allí fue corresponsal del diario Clarín , y como su nombre estaba prohibido en la Argentina, firmaba con el seudónimo Francois Lepot. Fue presidente de la Asociación de la Prensa Latinoamericana en Francia entre 1977 y 1987, y luego, su presidente de honor.

No queríamos dejar de mencionar brevemente su trayectoria porque en tiempos difíciles, como el que nos toca vivir hoy, la memoria de quienes hicieron posible esta universidad nos contiene y nos fortalece en la convicción de la capacidad igualadora de la educación pública y gratuita; en el poder transformador de la Universidad como herramienta de movilidad social ascendente y en el aporte diferencial y sustantivo que la producción científica hace en la sociedad del conocimiento.

Nos honra y nos conmueve reconocernos en la épica fundadora de una universidad que nació para dar respuesta a los problemas de su presente y su región. Nos toca a nosotros continuar en esta senda, proyectar la Universidad como comunidad educativa, resignificar su valor social e institucional y relegitimarla frente a la ciudadanía que la sostiene.

Creemos necesario incorporar nuevas perspectivas, porque ya no se trata de una universidad que atienda sólo a los problemas del desarrollo productivo de la región. Ahora, comunidades demográficamente extendidas, diversas en sus componentes poblacionales y permeadas por nuevas sociabilidades y conflictos, requieren de otras repuestas.

Posiblemente necesitemos pensarnos formando parte de un mundo globalizado altamente contradictorio. Una realidad donde, mientras la economía y la información se hacen cada vez más globales, las relaciones sociales y humanas se tensan sobre la base de la segregación y la desigualdad.

Por todo ello y sin perder la vista en el horizonte que hace 60 años dio sentido a nuestra querida universidad, renovamos nuestro compromiso en la defensa de la educación pública y de una ciencia soberana.

Feliz aniversario querida Unco y que los próximos 60 años continúen siendo de siembra fecunda. Muchas Gracias!

 

*Rectora de la Universidad Nacional del Comahue. Dra en Historia.

 

 

 

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